24h Le Mans victoria Audi y Porsche
La Carrera – las 24 horas de Le Mans ……
….. siempre son una prueba “especial”
Si nos sumergimos en la Historia de las 24 Horas, nunca han vencido las “liebres” en esta mítica carrera, simplemente han sido un señuelo, fruto de la estrategia de un Equipo, para forzar a los rivales a aumentar el ritmo de carrera y llevarles a romper.
Recordamos algunos episodios como cuando Françoise Cévert con el Matra, recibió la orden de hacer de liebre para que ganase otro Matra, o las sonadas cabalgadas de los Renault A-442 que eran más rápidos que Porsche y con excelentes pilotos de F-1 a su volante, rompían uno tras otro en la recta de Les Hunaudieres.
En la imagen inferior de 1977 podemos ver a los rápidos Alpine-Renault A442 Turbo, más rápidos en carrera que los Porsche 936, pero que terminarían rompiendo sus motores uno tras otro, no consiguiendo terminar ninguno…
Finalmente en 1978 y tras varios años intentándolo, el Alpine-Renault A-442B de Pironi y Jaussaud con el único de los A442 supervivientes, conseguía esa ansiada victoria para la marca francesa.
Pero repetimos, no gano el coche más rápido de Renault (con la pole vemos al de J.P.Jabouille) sino el que consiguió llegar a meta sin romperse. Tras esos años de intentos, Renault, siguiendo su habitual política deportiva, se retiró de las 24h de Le Mans para evitar ser derrotada de nuevo y como vigente vencedora de 1978.
Los lectores se preguntarán porqué esta disertación sobre las estrategias en la 24 horas. Ese análisis tan evidente, parece ser que el director deportivo de Peugeot, Olivier Quesnel creyó que no podría sucederles “eso” a ellos y en una táctica suicida, mando atacar y rodar a ritmo casi de pole a sus tres coches oficiales, ansiosos por liderar la prueba y humillar a los contrincantes.
Ya desde la salida, los tres 908 HDI FAP oficiales eran seguidos por el del Team Oreca, en tanto que los tres Audi HDi R15 se conformaban con rodar a “su ritmo” el que los R15 podían soportar sin sufrir problemas mecánicos.
Gravísimo error de cálculo, no es ninguna casualidad que Audi haya vencido en muchas más ocasiones la “Miticas” 24 horas y que uno de sus pilotos, Tom Kristensen acumule 7 victorias en el trazado francés, siendo el piloto que en más ocasiones se ha subido a lo más alto del podio en Le Mans.
El inicio de la prueba estaba siendo avasallador por parte de los hombres de Peugeot, pero una carrera de 24 horas es inmensamente ……… larga.
Y los cazadores se mantenían con los tres R15 detrás de sus rivales, dejándoles gozar de esos primeros instantes de efímera gloria.
La euforia duraba hasta la 3ª hora de carrera en el seno de Peugeot cuyo coche nº 2 pilotado por Marc Gene-Wurz-Davidson había marcado su mejor vuelta (la 37) en un tiempo de 3’21″208/1000 rodando a menos de un segundo del tiempo de calificación y por detrás de sus compañeros Montagny-Sarrazin-Minassian que estaban 5 segundo por delante de ellos en primera posición.
Pero ya hacía más de media hora que uno de los Peugeot 908 HDI FAP había abandonado, el nº 1 que había sido pilotado hasta entonces por Lamy-Bourdais-Pagenaud y que había roto hacía ya 10 vueltas, con lo cual los Audi R15 HDi se encaramaban a la 4ª 5ª y 6ª posición encabezados por el de Capello-Kristensen- McNish, y a menos de 2 minutos del líder.
Dentro de la lucha entre los GT2, tres coches había adoptado también el papel de liebre, el Ferrari F430 GT de Kaffer-Mello-Bruni que se encontraban en la primera posición de clase y con 1 vta de ventaja sobre los dos Chevrolet Corvette ZR1 de Gavin-Beretta-Collard y sus compañeros O Conell-Magnussen-Antonio García a 1 minuto del primer Corvette.
Estos tres coches habían estado luchando por la primera posición entre los GT1 rodando en 4’00″5/10 el Ferrari y 3’59″9/10 y 4’00″5/10 los dos Corvette, resolviéndose la lucha por el momento a favor del coche italiano.
Teniendo en cuenta que su tiempo de calificación era de 3’59” 4’00”, nos dábamos cuenta que estos tres equipos estaban rodando a tope de posibilidades de sus respectivos coches para lograr el liderato provisional.
Una táctica arriesgada y que difícilmente podía darles la victoria.
Imperturbables y a solo 20 y 25 segundos respectivamente, los Porsche 997 RSR de Lieb-Lietz-Henzler y el de Pilet-Narac-Long no dejaban alejarse a los Corvette y ya se encontraban por delante del Ferrari de Alesi-Fisichella-Vilander que eran sextos de clase GT2
Una hora más de Carrera, la 4ª y el Porsche 997 RSR del Felbermayr Proton, excelentemente pilotado por Richard Lietz, Marc Lieb y Wolf Henzler se encontraba ya en tercera posición a espaldas del Ferrari y el Corvette a solo 1 minuto 40 segundos del liderato de GT2 y pese a rodar en 4’01” ya había dado cuenta del primero de los Corvette, con un ritmo constante y regular.
Desde la 4ª a la 7ª hora de carrera, todo discurría con bastante calma, pero la entrada en la 8ª hora de carrera traía no pocos cambios.
El Peugeot 908 HDI nº 1 pilotado por Gené-Wurz-Davidson sufría problemas de alternador y debía entrar en boxes dejando a dos de los Peugeot en cabeza y cayendo por su parte hasta 7ª posición con tres vueltas perdidas.
Con uno de los Peugeot retirado y el nº 1 retrasado, tras el único superviviente del equipo oficial que mantenía el liderazgo de la prueba, apoyado por el otro 908 del Team Oreca que se mantenía segundo a 1’48” del líder, pero tenían ya dos de los Audi R15 HDi a poco más de 1 minuto del Peugeot de Oreca y el tercer R15 siguiendo a sus dos compañeros un poco más atrás.
Todavía no se habían disputado un tercio de carrera y en Peugeot empezaban a sentir el aliento de sus rivales de Audi detrás de ellos y rodando regularmente 2 segundos más lentos, con calma, pero sin dejarles respiro.
También en el seno de Ford, las vueltas anteriores a la 8ª hora eran nefastas, abandonando dos de sus tres coches, el de Gachnang-Allemann-Frey en la vta. 59 y anteriormente el de Leinders-Palttala-de Donker
La carrera perdía pues a los dos LMGT1 de Ford, los GT de Matech
La fuerte lucha que estaban manteniendo los pilotos de LMGT2 también se cobraba su tributo y el más rápido de los Ferrari F430 GT, el de Kaffer-Mello-Bruni acusaba las consecuencias de haber estado rodando en tiempo de calificación durante su lucha con los Corvette C6 ZR1 que en su lucha contra el Ferrari se permitían superar a los Corvette de clase GT1 del equipo de Luc Alphand
Los Corvette C6 ZR1 seguían rodando en 3’58″/3’59” con un ritmo excesivamente rápido, pero se encontraban en 1ª y 2ª posición respectivamente de la clase GT2 con el de Gavin-Beretta-Collard 1’58” por delante del de Antonio García-O Connell-Magnussen
Tras los dos Corvette oficiales, Richard Lietz-Marc Lieb-Marco Holzer con el Porsche 997 RSR se mantenían firmes y rodando con extraordinaria regularidad, en la 3ª posición y sin necesidad de bajar de sus tiempos de 4’00” se encontraban a 1 minuto del segundo de los Corvette.
Tras los problemas mecánicos del Ferrari de los líderes, el F430 GT mejor clasificado era ahora el del AF Corse con los ex-F1 Jean Alesi-Giancarlo Fissichella-Toni Vilander que a pesar de algunos incidentes todavía se mantenía en la lucha y en 4ª posición por detrás del RSR de Lietz
Por su parte el Porsche 997 RSR del IMSA Performance Mamut de Pilet-Narac-Long se encontraban ahora a 1 vta del otro RSR del Felbermayr, manteniendo la 5ª plaza de clase pero habiendo perdido algo de terreno respecto al Porsche nº 77
Entre los Porsche 997 RSR también se producía una baja, el del Flying Lizard Motorsport que en ningún momento pudo mezclarse con los primeros, abandonando finalmente en la vta 61
La siguiente incidencia destacable, era el definitivo abandono del Ferrari de Risi Competizione que con Kaffer-Melo y Bruni había oficiado de “liebre” en su categoría, sucumbiendo ante los Corvette primero y retrasándose después a las 3 últimas posiciones de la general aquejado de múltiples problemas tras el sobreesfuerzo, debía abandonar cuando se llevaban disputadas 9h15′ de carrera.
…… 11 horas disputadas de dura carrera a fuerte ritmo ……