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Spa Porsche Days 2010

Segundo día – Sabado – Final de los entrenamientos


Dos de los miembros del Porsche Club Great Britain regresando también a su box. En primer término el 964 RS Cup Maritimbleu por delante del de Melvin que luce los colores de Tormo-Diadora (como en su época, llevaba el rapidísimo piloto argentino Oscar Larrauri compañero de Jesús Pareja más tarde abordo de los 956 y gran piloto de Porsche)
Melvin saludándonos a su paso, ….. un gran compañero de pista y un placer rodar con el y todo el grupo del Porsche Club GB
Algunos de nuestros pilotos regresando a boxes, en primer término Venancio con el 996 GT3 por delante de Patrice-Sascha con el 997 GT3 RS del primero.
En los boxes siempre reina un gran ambiente, especialmente a partir de la sesión del sábado ….. el domingo el ambiente es casi excesivo por la gran cantidad de aficionados que vienen a visitar la prueba belga.
Nuestro box con los coches medio colocados ya y con el de Javier Calzada en primer término.
Algo que nunca falta en menor a mayor medida en Spa es el “tributo” que se cobra tan especial trazado entre los participantes, si bien hay que reconocer que a cada edición el circuito es más seguro y con mayores zonas de seguridad.

  Daños colaterales …. siempre inevitables


Estos dos participantes de clase Sport, tenían el accidente entre ellos en la recta posterior al Raidillón, no sabemos porqué motivo.
Los daños en los coches eran de cierta importancia pues es una zona de 4ª/5ª pero la seguridad personal de los pilotos, está asegurada por la robustez del chasis y las barras de refuerzo antivuelco.
 
Pocos incidentes se registraban este año con la pista seca, lo que contribuye a facilitar las cosas y estos dos coches accidentados eran resultado de un único incidente entre ellos.
Lógicamente las zonas más dañadas suelen ser las suspensiones además de plástico fibra y algún radiador de agua y aceite.
Este en concreto resultaba con el trapecio de suspensión trasero arrancado al golpear el guard-rail doble
En el caso del 997 GT3 RS, no llegaba a desprenderse la rueda trasera, pero también resultaba dañada la suspensión y …. luego hay que ver más cosas que siempre suelen aparecer por sorpresa ……..
Terminada ya la jornada del sábado, sin haber sufrido el más mínimo problema mecánico o incidente dentro de nuestro Team, a excepción de los problemas irresolubles en la electrónica del RS 3.8 de Lionel, procedíamos a guardar los coches en el box esperando a la sesión matinal del domingo ya que habitualmente, al tener que tomar nuestros respectivos vuelos hacia España y cargar los coches en el camión, no nos deja tiempo para rodar en la única sesión que queda por la tarde.
Esta 10ª Edición de los Porsche Francorchamps Days fue para nosotros perfecta, con el óptimo funcionamiento de todos los coches, los buenos tiempos logrados y la satisfacción de los respectivos pilotos por el resultado obtenido y la experiencia acumulada durante los tres días de entrenamientos.
A pesar de hacer un tiempo espléndido en Spa, era algo engañoso respecto a nuestros vuelos de regreso previstos, pues la erupción ese mismo jueves de nuestra partida del volcán Islandés Eyjafjalla había provocado el cierre del espacio aéreo Europeo a todos los vuelos por la nube de ceniza que podía afectar a los reactores de los aviones, por lo que el domingo se nos presentaba incierto, no sabiendo si podríamos regresar o deberíamos quedarnos un par de días más atascados en Spa ……..
Las perspectivas que barajábamos ante la posibilidad de que finalmente los aeropuertos europeos permaneciesen cerrados eran múltiples, si bien la más deseada por todos era regresar a nuestras bases, pues llevábamos desde el jueves muy temprano fuera de casa y sin parar un momento, otra de las opciones era quedarse a descansar un par de días en el hotel (pero se nos antojaba aburrida esa opción) o ….. ir a Nürburgring-Nordschleife a seguir rodando, pero esa opción para los coches con slicks, suponía de nuevo replantear toda la logística del camión y equipo completo …….. total, incertidumbre que esperábamos poder solventar cuando nos levantásemos el domingo por la mañana.
Ahora tocaba acabar de disfrutar de una segunda jornada de entrenamientos muy completa y provechosa.
Dormimos esa noche bajo la sombra alargada del hasta entonces ignorado “Eyjafjalla” y por cierto, muy bien después de un intensísimo y caluroso día ……… tiempo habría al día siguiente de tomar una decisión, acorde con el estado de los aeropuertos que la “rumorología” apuntaba a que iban a abrirse a partir de las 8:00 Am del domingo.

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